Gastón Monge
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Sumidos en la más profunda crisis de su historia, los hospitales, general, Issste e Imss están en franco descuido al padecer desde hace muchos años de una infraestructura deficiente y obsoleta al igual que de equipos médicos y de rayos ‘X’, ausencia de materiales de curación, laboratorios inoperantes y un descuido total en su infraestructura por parte de las autoridades nacionales y estatales.
Lo peor es que estas deficiencias y carencias afectan tanto al personal como a los pacientes, y ante la apatía de parte de las autoridades centrales y estatales, los hospitales de esta ciudad pasan hoy por una severa crisis que saca a flote vicios ocultos y negligencia administrativa que los convierte en un riesgo y en focos de infección.
De acuerdo a empleados entrevistados, todo ello revela un total descuido y desatención que se traduce en una mala atención hacia los pacientes y hacia sus trabajadores, y mientras el número de personas que acuden a estos hospitales aumenta, el servicio, la calidad, la infraestructura y el equipo médico y de laboratorio, son los mismos desde hace muchos años.
El Hospital General, un riesgo para la salud
En el hospital general la situación es tan grave que al menos 10 empleados, entre médicos, enfermeras, administrativos y de intendencia, se contagiaron de tuberculosis debido a que las áreas de urgencias y encamados son un grave foco de infección ante la falta de aires acondicionados, ventilación e higiene en el área de urgencias y encamados.
Con 25 años de servicio, este hospital ya está ‘enfermo’, según comenta Luis Alberto Zúñiga Bernal, secretario general del sindicato, debido a que las pésimas condiciones en que se encuentra, además de contagiar a sus empleados, ha provocado que muchos de ellos ya padezcan de enfermedades como diabetes e hipertensión, lo que reduce sus capacidades y habilidades en sus labores.
Sumado a ello, a un empleado de nombre Juan Carlos Torres, se le negó el permiso de faltar a sus labores, lo que le provocó un infarto debido a la negativa del director del hospital, David Gómez Ramírez, a quien responsabilizó de lo que pueda ocurrir a este empleado y al resto de los 450 empleados que laboran en dicho nosocomio.
La última semana de mayo, ante la negligencia de atender las necesidades de este hospital, los trabajadores protestaron por tercera ocasión en un año, porque la situación en vez de mejorar ha empeorado.
“Solicitamos materiales de insumo y equipo médico y de curación, para que los trabajadores puedan desempeñar sus funciones y no caer en negligencia. Nos faltan insumos y el equipo portátil de rayos ‘X’ no sirve, y si nos llega un paciente para una urgencia, pues no tenemos el equipo para meterlo a quirófano”, explica.
Ante la falta de equipo, solicitan en ‘préstamo’ a otros hospitales algunos servicios, y de acuerdo a la doctora Irma Gladis Cano Ramírez, con más de 20 años de trabajo en ese hospital, “aquí tenemos el conocimiento pero no tenemos el avance tecnológico. ¿Cómo vamos a ofrecer calidad con el puro conocimiento? Así no se puede trabajar porque estamos con un retraso de muchos años, porque no se cuenta con lo mínimo indispensable como son equipos de rayos ’X’, y un equipo portátil, y los cubículos de ginecología y pediatría carecen de lo indispensable”, señala.
Además, dice que en el laboratorio no hay suficientes reactivos o se carece de ellos, por lo que los pacientes que llegan a solicitar un servicio, se van como llegaron, o peor. “¿Cómo cree usted que salgan, con tantas carencias?”, cuestiona.
Las normas de salud NM-016, NM-06 establecidas por la Secretaría de Salud, indican que un hospital de segundo nivel, como el general, debe contar con lo mínimo necesario para ofrecer un servicio de calidad, lo que no ocurre en estos momentos.
Bajo esas condiciones el hospital representa un serio riesgo de contagio para los pacientes y sus familiares, ya que en urgencias hay un área de aislados para enfermos de tuberculosis, pero no hay extractores que ventilen y eliminen el bacilo de esta enfermedad, y tampoco se cuenta con una campana ultravioleta, además de carecer de presión negativa que impida que las bacterias se esparzan por el hospital.
“Ya no podemos seguir con esta situación, porque al jubilarnos vamos a caer en un hospital porque estaremos enfermos por contagio”, explica el secretario general, tras mencionar que las peticiones, documentos y protestas, no han servido de mucho, porque las autoridades no les dan respuesta.
El Issste y sus carencias
Pero si el hospital general está al borde del colapso, en la clínica del Issste las cosas no son mejores, y a pesar de que el director Gabriel Mancilla Salinas diga que en sus 40 años de existencia este hospital no está deteriorado aunque sea un hospital ‘antiguo’, sí cumple con las necesidades con que se cuenta.
Asimismo, menciona que está en condiciones de prestar buen servicio, y al mencionarle sobre el equipo médico que de acuerdo a trabajadores, se encuentra deteriorado, su molestia y enojo fueron evidentes, por lo que se negó a ratificar o negar lo que empleados dijeron al respecto.
“No tengo nada que decirle a usted sobre este asunto, pero diré que estamos prestando el servicio, y cualquier falta que haya la gestionamos a la delegación y a la subdelegación”, señala con evidente molestia ante el cuestionamiento.
Hace un mes llegó al hospital por gestiones del delegado estatal, Guillermo Manzur, una mesa y una lámpara y un cauterio de quirófano, además de variaos carros de resucitación pulmonar, y monitores para urgencias y para terapia, así como 16 colchones cama, para algunas de las 36 camas con que cuenta el hospital.
“Esta vez nos cayó Santa Clós antes de Navidad, y no sé de dónde tenga usted esa información, pero si no me cita a alguien no sé de dónde saca esos datos”, refiere con evidente molestia.
Por si fuera poco, presume que se cuenta con una mesa de quirófano nueva así como el alumbrado, y al preguntarle si ya se descongeló la bolsa de trabajo, contestó con evasivas aún más molesto, al decir que las plazas son de la misma clínica pero que no hay contrataciones nuevas, lo que implica que no hay nuevas plazas por estar ‘congeladas’ por la Dirección Nacional, término que no le gustó pero que tuvo que reconocer.
La clínica del Issste cuenta con aproximadamente 270 trabajadores, algunos de confianza, y la bolsa de trabajo es interna y con el personal de base de la misma clínica.
Sin embargo, la versión del director de la clínica fue cuestionada por el delegado sindical Francisco Javier Sepúlveda Moreno, al señalar que las máquinas de lavandería ya no funcionan bien, por lo que el servicio frecuentemente se subroga a otros hospitales, y que no se cuenta con un médico especialista responsable de los estudios del área de rayos ‘X’.
Menciona que envió solicitud a la capital estatal para la contratación de dos médicos, ya que desde hace tres años no hay contrataciones nuevas, y que la clínica requiere de especialistas en cirugía, en ginecología, en radiología, personal de farmacia y tres médicos generales.
Del área de rayos ‘X’, dice que se subrogan los estudios de ecosonogramas, Tacs y resonancias en el hospital México Americano, porque los equipos no funcionan de manera adecuada, mientras que desde hace tiempo no se cuenta con un jefe de laboratorio, lo que genera problemas.
La fachada de este hospital se encuentra deteriorada por falta de mantenimiento; le falta pintura, la maleza está crecida, basura y equipos inservibles abundan por todos lados, ropa de pacientes y del personal expuesta al sol y a las bacterias.
“Estamos esperando que vengan a darle mantenimiento a la clínica, pero batallamos mucho con la limpieza, porque al personal se le paga poco y batallan para cobrar, mientras que hay solo tres veladores para toda la clínica y se requieren cinco, lo que permite que gente ajena se meta al estacionamiento”, explica.
Aunque hay dos ambulancias modernas, se batalla con los choferes, a quienes se les retrasa el pago cuando hacen traslados por un ‘extra’ de 490 pesos a Monterrey por cada viaje, de los cuatro mensuales.
En resumen, el delegado sindical dice que la clínica del Issste “da tristeza ver tantas deficiencias con que cuenta, tanto en el mantenimiento como en lo interno, y hay muchas cosas que nos hacen falta, y los oficios que mandamos a Victoria, no son contestados
¿Soluciones?
En lo que respecta al hospital del Imss, de acuerdo a Fernando Garza Garza González, presidente del Consejo de Instituciones, “la mala calidad que presta a sus derechohabientes se debe a que ya es un hospital obsoleto y que debe ser reubicado”.
Menciona que ya existen peticiones al gobierno de Tamaulipas y a la Secretaría de Salud para su reubicación, peticiones que de igual manera el presidente de la Cámara de Comercio, Jaime Mireles envió también para si reubicación.
Francisco Mejía, coordinador médico de la SS en la ciudad, comenta que la SS tiene injerencia en estos tres hospitales para que sus problemas y deficiencias sean resueltos, “y tan es así que ya se ve la posibilidad de que se mejore el equipamiento y la mejora de las unidades, al menos de la dependencia”, señala.
Dijo que ya se trabaja con los delegados del Imss y del issste, ya que se trata de temas de interés federal y estatal, y que hay propuestas claras para arle solución a los problemas que padecen, y que ya se expuso esto a la titular de la dependencia en Tamaulipas, Gloria Molina Gamboa.