By Gastón Mongfe
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- La creciente inseguridad que viven los operadores del transporte de carga en las carreteras del país, y la convocatoria hecha por este sector para un paro nacional el 5 de febrero, fue tomado por el empresario local Mario Palos Garza como algo bueno, “porque es cierto que las carreteras son afectadas de manera muy grave para la industria y para los conductores que ponen en riesgo sus vidas”.
Confió que ante tanta inseguridad en las carreteras mexicanas las autoridades los escuchen, porque es un tema que afecta la relación que se tiene con el ‘Nearshoring’ entre México y Estados Unidos, al mantener niveles importantes de intercambio de mercancía hacia ambos lados de la frontera.
Pese a ello dijo Palos no tener cifras de las pérdidas económicas que ocasiona la inseguridad en las carreteras, aunque de acuerdo al diario El Economista, el año pasado cada hora se cometieron dos atracos en alguna carretera mexicana, lo que representó pérdidas económicas a la industria del transporte de carga, de al menos 7 mil millones de pesos.
Baja competitividad
En ese sentido, la Fiscalía General de la República dio a conocer en un comunicado que el año pasado se cometieron 13 mil 848 asaltos a operadores de camiones de carga en carretera, casi un 5% más que un año antes.
Esto ha ocasionado una severa crisis en el transporte de carga, a lo que se suma el proceso de desaceleración en los mercados, lo que ‘relajó’ al sector industrial, dijo Palos al comentar que otra de las afectaciones para el transporte de carga es la fuerte competitividad entre las diferentes líneas de transporte de carga en el país, en cuanto a los precios, “y se debe a que hay una importante presión por parte de los mercados para que la industria de la logística baje sus precios y se ajusten los mercados en un intento de combatir las presiones, lo que trae como resultado una baja en la inversión en esta importante industria”, explicó.
Confió el empresario que esta crisis que comenta pase pronto y que la recuperación sea para el bien tanto de los transportistas como de los operadores de los tracto camiones.
Añadió Palos que al iniciar este 2024 el impacto en el precio de los combustibles y los altos costos en el peaje de las autopistas de cuota y los puentes internacionales va muy ligado a la crisis que padecen los transportistas en todo el país.
Sin embargo, dijo que la industria presiona para que los precios en los combustibles y las refacciones bajen, y de ese modo los empresarios se ajusten a los nuevos costos para tener precios más competitivos en el manejo de las mercancías través de sus camiones, y de esa manera combatir la inflación.
“Pero esto es algo que pudiera tardar tiempo porque algunas empresas se ha visto muy afectadas, y esperemos que esto pase pronto”, reflexionó.
