RedacciónPEKÍN. – La política arancelaria impuesta por el presidente estadounidense DonaldTrump a nivel mundial obligó a China a reducir su mano de obra interna que labora en factorías, lo que afecta también la entrega de sus productos a clientes y empresas en casi todas sus ramas, desde ropa hasta electrodomésticos y electrónica.La medida aplicada por Trump, de acuerdo a fuentes consultadas, ha ob ligado a clientes estadounidenses a cancelar sus pedidos a China debido a los altos costos del producto al tener que pagar el 145% de impuestos por su importación, toda vez que el 15% de todas las exportaciones chinas van dirigidas a la Unión Americana, lo que mantiene una notable reducción de la producción en el país asiático.Algunos dueños de fábricas afirmaron que están reduciendo las horas extra así como el trabajo realizado sobre todo los fines de semana.La Asociación de Comercio Electrónico Transfronterizo de Shenzhen, anunció que alguno de sus clientes están “extremadamente ansiosos” y han pedido a fábricas y proveedores que detengan o retrasen entregas.En algunas fábricas chinas se ha suspendido la producción durante una o dos semanas.Ante este panorama de guerra comercial entre Estados Unidos y China, el presidente Trump habia dicho hace unos días que China y no Estados Unidos está obligada a negociar con su rivan americano, por lo que minimizó al país asiático al mencionar a través de su portavoz Karoline Leavitt que China necesita formalizar un acuerdo con Estados Unidos y no lo contrario, toda vez que lo único que diferencia aa ambos países, es que China es más grande.