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Oscar Contreras
El gobernador Américo Villarreal Anaya dará lectura a su tercer informe de gobierno en Tampico en un contexto mediático nacional que lo cuestiona y vincula con el empresario Sergio Carmona y el agricultor Ismael “El Mayo” Zambada.
Sin embargo, nadie de sus detractores hasta el momento ha demostrado con pruebas -videos, fotografías o grabaciones- que confirmen que ha tenido trato con estos dos personajes y ni siquiera tienen pruebas de alguna transacción bancaria que le hayan hecho.
De tal manera que todo lo que ha salido en los medios de comunicación, es producto de la imaginación de gentes que han logrado crear escenarios para atraer la atención de un público que le gusta ese tipo de historias.
Y ahora con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca a Villarreal Anaya sus enemigos lo han aprendido en ese mundo imaginario ya muchas veces y pudiera decirse que casi lo hacen un capo de la mafia tamaulipeca, cuando su atención está concentrada en el desarrollo del estado.
El ex presidente Andrés Manuel López Obrador siempre le dio un trato especial y en los hechos lo demostró cuando al tomar posesión del cargo de gobernador, envío a todo al gabinete del gobierno federal para que lo fortalecieran con su presencia ante el embate que en la elección había tenido del cabecismo.
Este afecto que siempre le ha tenido se lo hizo saber públicamente muchas veces y aunque en los hechos nunca lo hizo con obras extraordinarias que hubiera transformado realmente el estado, nunca lo dejó solo.
Sucede de igual manera con la presidenta Claudia Sheinbaum con la que mantiene una relación cordial y esto se refleja con la atención que los secretarios del gobierno federal le tienen y aunque no tienen dinero para obras o acciones extraordinarias, siempre están atentos a sus peticiones.
Si sus adversarios y enemigos quieren cuestionar su presencia en el gobierno, no tienen por qué vincularlo con personajes que hacen negocios fuera de la ley, creemos y estamos seguros que el gobernador Américo Villarreal no tiene la formación ni la pinta de los delincuentes que pertenecen a las organizaciones criminales.
Es más, ni siquiera nos imaginamos que algún día se haya sentado con Carmona o con El Mayo a platicar de negocios. Ya es tiempo que le cambiemos de canal porque se ve que el doctor Américo Villarreal Anaya está muy tranquilo y trabajando por Tamaulipas.
Lo interesante será escuchar lo que dará a conocer a los tamaulipecos, los avances que su gobierno ha tenido y lo que hará en los próximos tres años que le quedan y marcan el inicio de la recta final de su mandato.
De salida.