Redacción
(CNN Español) – Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública de México durante la presidencia de Felipe Calderón y juzgado en Estados Unidos por cargos de narcotráfico y vínculos con la delincuencia organizada, fue sentenciado a 460 meses de prisión, un poco más de 38 años.
Tendrá 5 años de libertad condicional y le imponen una multa de US$ 5 millones de dólares. García Luna fue condenado “por su ayuda durante una década al Cártel de Sinaloa a cambio de millones de dólares en sobornos”, dijo el Departamento de Justicia de EE.UU.
García Luna fue declarado culpable de participar en una empresa criminal continua, conspiración para obtener, importar y distribuir miles de kilogramos de cocaína en Estados Unidos y haber hecho declaraciones falsas a funcionarios estadounidenses de inmigración tras su detención en diciembre de 2019.
En septiembre, García Luna reveló que la Fiscalía de Nueva York le propuso aceptar un acuerdo de culpabilidad que supondría pasar en prisión seis meses, obtener beneficios económicos y convertirse en testigo para señalar a personas e instituciones de México, informó CNN. El exsecretario de Seguridad Pública dijo no haber aceptado el trato porque suponía el debilitamiento “del desarrollo, la paz pública y la vida institucional del país”, según la comunicación manuscrita que compartió su abogado con CNN.
El martes, un día antes de la sentencia, García Luna hizo pública una carta de su puño y letra dirigida al juez Brian Cogan en la que cuenta que dentro de la prisión en la que ha pasado los últimos 58 meses de su cautiverio ha participado en programas para capacitación de concientización de uso y abuso de drogas, así como en un programa de Educación en Prisión de la Universidad de Columbia.
Además, el exsecretario de Seguridad Pública subraya que cuando fue funcionario público tuvo conocimiento de información reservada y privilegiada que incluía la colaboración de autoridades estadounidenses de primer nivel. 📄 Haz clic aquí para ver la carta manuscrita completa.
Con información de María Santana y José Álvarez