By -Se denuncia desvió de 180 millones
-Y se revisan otros 500
-Oscar Alarcón y Enrique Álvarez, gentes de Erasmo
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Raúl Hernández Moreno
El flamante rector de la UAT, Dámaso Anaya, llegó tumbando caña y hoy, a través del abogado general, José Carlos Mora García, anunció que se presentó un denuncia en contra del ex rector Guillermo Mendoza, el ex gobernador Francisco García Cabeza de Vaca y el diputado federal Gerardo Peña, por un presunto desvío de más de 180 millones de pesos.
Esa cifra es aparte, de otros 500 millones de pesos en los que hay inconsistencia y más adelante se sumaran a una nueva denuncia ante la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas.
Los funcionarios citados, junto con un tal Jesús Salazar, habrían incurrido en delitos como ejercicio ilícito de servidores públicos, peculado, colusión de servidores públicos y uso indebido de atribuciones, entre otros.
Como parte la denuncia, el gobierno de Cabeza habría simulado la entrega de recursos a la UAT.
En su momento hubo denuncias periodísticas que daban cuenta del desvió de recursos de la UAT y la Comapa de Tampico para apoyar las campañas electorales del PAN, lo cual nunca se investigó, porque Cabeza de Vaca sometió al Ejecutivo, al Legislativo y a los órganos autónomos y decidía que debían hacer.
Habrá que darle tiempo al tiempo para ver si la Fiscalía desahoga esta denuncia y conviene recordar que hay otras 62 que ha presentado el gobierno estatal contra ex funcionarios del sexenio de Cabeza y hasta ahora solo hay dos casos que van avanzando.
En otro tema, Enrique Álvarez del Castillo y Oscar Alarcón Santos, son dos de los amigos que tiene en ésta frontera el diputado federal Erasmo González Robledo, el primero en ser destapado de los 43 candidatos de Morena a las presidencias municipales en Tamaulipas.
Erasmo será candidato a la alcaldía de Morena, posición que ocupó de manera interina en el 2007 y la cual también ostentó su padre, Erasmo González Martínez.
Álvarez del Castillo formó parte del equipo asesor de Erasmo en la presidencia de la Comisión de Programación y Presupuesto en la Cámara de Diputados, en el primer período legislativo.
A su vez, Oscar Alarcón se relacionó con Erasmo desde los tiempos en que este se sumó al equipo de Mario Delgado cuando compitió por la dirigencia nacional de Morena. Erasmo correspondió a esa confianza visitándolo aquí en Nuevo Laredo.
Por supuesto, Erasmo debe de tener más amigos en esta ciudad.
Con el temprano destape de Erasmo, los morenistas esperan que se destraben las candidaturas en municipios y distritos, para que pueda ponerse en marcha la operación cicatriz y que todos los grupos se sumen al proyecto elegido.
No habrá escurrimientos a otros partidos, pero tampoco se quieren que los perdedores simulen integrarse. Quieren que se sumen de verdad.
