By Cuentas Claras
Javier Claudio
. Merecido reconocimiento a la directora general del periódico “El Mañana”
· – . Ningún gobierno anterior le habría dado la Medalla Belisario Domínguez
· – . Aquella plena defensa de la libertad de expresión, hoy debe ser fortalecida
Por Javier Claudio
Claro que sí. – Honor a quien honor merece. Enhorabuena por la entrega de la Medalla Belisario Domínguez a la periodista Ninfa María Deándar Martínez, directora general del periódico El Mañana por parte del Senado de la República, reconocimiento que además destaca a Nuevo Laredo y que a su vez merece reflexión de quienes ejercemos esta noble profesión por el alto significado para hacer votos porque se mantenga en pie este medio de comunicación, ícono de la información con convicción.
Clarín. – Doy testimonio por los casi 25 años laborando ahí en ese reducto del buen periodismo, al brindarme en 1979 una oportunidad de permitirme un sitio en lo que llamaban Departamento de Corrección y desde ahí observar la atención bien puesta en la presencia y el acto justo de la señora Ninfa, siempre allegada al pueblo y ni qué decir en la defensa de la libertad de expresión. Su generosidad empataba en el buen trato el periodista, porque siempre contará con los implementos necesarios y la buena labor.
Claroscuro. – Tuvo que ser el Gobierno de Morena quien fijara su aprecio para el reconocimiento a esa intensa lucha por el buen periodismo, siempre del lado de las causas nobles, pues de otro modo tal vez jamás se le habría hecha justicia por esos gobiernos liderados por partidos políticos a los que exhibió en sus malas prácticas de abuso y corrupción. Si bien publicó en sus páginas información relacionada al desempeño del sexenio en turno, aparecían amparadas bajo IP (Inserción Pagada).
Claridades. – Inteligentemente presta a lidiar con cada uno de los gobiernos en turno, supo maniobrar con el pensamiento de su señor padre don Heriberto Deándar Amador, quien moderaba los embates del periodismo aguerrido, casi constante hacia el recurrente mal sistema de gobierno, al acotar que luego se “quedaría el periódico sin amigos”. El premio es a esa dama de palabra, de gran valor y sagaz en sus negociaciones con políticos, pues bien separaba la publicidad pagada y el criterio.
Aclarando. – Negociadora y de mucha diplomacia en la política, no se libró de pleitos –hasta enfrentar atosigamiento– de los gobiernos al ser coaccionada para fines opuestos a su defensoría del pueblo. Fue harta su preocupación cuando fue bloqueada su empresa periodística por {órdenes de los gobernantes) en el surtimiento del papel. No ver la luz una edición, era coartarle su pujanza por mostrar con honestidad y claridad la información del día y dar fe a la ciudadanía de la verdad. Cuán difícil y lo solventó.
Clarificando. – Sus desvelos por mantener en pie ese periódico que cumplió cien años, tienen resonancia aun en esas paredes, al aparecer de pronto en horas de la madrugada para conocer de cerca la razón por la que se había ido la energía eléctrica y paró la prensa. Sin los avances en la tecnología que hoy existen, su tenacidad la llevó a resolver situaciones de maquilar el periódico en Reynosa o en alguna otra parte, en un ir y venir ajetreado de personal y colaboradores para sacar adelante la edición del día.
Claro que no. – El reconocimiento nacional a la señora Ninfa María Deándar Martínez, tiene un alto significado para Nuevo Laredo, al lograr construir ese puente de cien años mediante acciones de defensa por la verdad, por el desvalido, por las causas nobles, hasta darse el tiempo de defender a sus periodistas de la intentona exterior de desvirtuar el buen nombre del reportero e instarlo por enfrentar los ataques sucios y de atentado al medio informativo y defenderse con la palabra escrita. Aún lo recuerdo así.
Sabía usted que. – La Relatoría Especial de la ONU sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión, considera que este tipo de definición funcional incluye a quienes trabajan en medios de información y al personal de apoyo, así como a quienes trabajan en medios de comunicación de la comunidad y a los periodistas ciudadanos cuando desempeñan por un tiempo esa función. El periodismo es una actividad y un servicio necesario para cualquier sociedad.
